Ambulancias SVA: equipadas para salvar vidas

Las ambulancias SVA, también denominadas UVI Móvil, son las destinadas al traslado de pacientes de alto riesgo. Son ambulancias asistenciales tipo C, es decir, dotadas del personal y la equipación necesaria para prestar asistencia sanitaria in situ a pacientes críticos, en el menor tiempo posible y con los elementos necesarios para proporcionar soporte vital avanzado (SVA) y vigilancia intensiva en ruta por un/a enfermero/a y médico/a, si es necesario.

Cuando hablamos de la equipación de este tipo de ambulancias, hay que tener en cuenta que se trata de una asistencia extrahospitalaria y, por tanto, es un material que debe estar perfectamente adaptado a las circunstancias que se dan fuera del ámbito de los centros sanitarios.

En este sentido, deben ser equipos médicos dotados de alta tecnología y precisión, resistentes a condiciones extremas, con la autonomía adecuada y de fácil transporte y manejo para sus usuarios.

 

Equipamiento básico de una ambulancia SVA

Ya sabemos que una ambulancia SVA debe contar con la dotación de personal y material sanitario adecuados para dar atención en Soporte Vital Avanzado. La equipación sanitaria básica de los vehículos de emergencia está regulada por los Ministerios de Sanidad y Consumo y de Fomento, junto a las diferentes comunidades autónomas, estableciéndose así sus características técnicas, así como el equipamiento sanitario y la dotación de personal de cada uno de los distintos tipos existentes.

Según la normativa, todos los vehículos destinados al transporte sanitario cuentan con una dotación sanitaria mínima entre la que se detalla aquella que, de manera específica, debe incluir una ambulancia de SVA:

  1. Instalación fija de oxígeno, aislada eléctricamente, con tomas rápidas en las paredes convenientemente rotuladas.
  2. Respirador que permita una función respiratoria de 10-40 ciclos por minuto y un aporte de O2 al 50% y al 100%. Caudalímetro, manómetro de control de presión y válvula de sobrepresión. (Sólo para ambulancias que vayan a prestar soporte vital avanzado).
  3. Ventilador manual tipo balón, válvula unidireccional y posibilidad de ventilación con Fi02 mediante conexión a fuente de O2 (adulto y niño).
  4. Equipo de aspiración eléctrico fijo o portátil con reservorio.
  5. Juegos de tubos endotraqueales adulto, niño y lactante.
  6. Laringoscopio con palas de adulto y niño.
  7. Mascarillas de ventilación adulto y niño.
  8. Material fungible de apoyo a la ventilación.
  9. Maletines de resucitación cardiopulmonar diferenciados para adulto y niño, que permitan su utilización en el exterior de la ambulancia asistida, con el material adecuado.
  10. Monitor-desfibrilador: de tipo portátil con autonomía, provisto de palas 0 parches adhesivos, que sirvan como electrodos de ECG y para desfibrilar, con los accesorios necesarios. Generador externo de marcapasos, con funcionamiento fijo y a demanda con posibilidad de regulación de intensidad de estímulos. Registrador de electrodos de un solo canal con posibilidad de conexión a monitores que permitan 12 derivaciones. (Sólo para ambulancias que vayan a prestar soporte vital avanzado).
  11. Dispositivo para suspensión de soluciones de perfusión intravenosa.
  12. Material fungible para punción y canalización percutánea venosa.
  13. Esfigmomanómetro, fonendoscopio y linterna de exploración.
  14. Material que permita la inmovilización integral del paciente, así como la inmovilización de miembros superiores, inferiores y columna y juego de collarines cervicales.
  15. Material quirúrgico.
  16. Material de cura.
  17. Equipos de sondaje y drenaje estériles y desechables.
  18. Recipiente frigorífico o isotermo con capacidad suficiente.
  19. Medicamentos: toda la medicación se deberá conservar en condiciones adecuadas de luz y temperatura y se revisará periódicamente la caducidad. Se evitarán los envases que se puedan dañar al golpearse o lesionar a los ocupantes.

Como podemos observar, la dotación de una ambulancia de SVA no es muy diferente a la requerida para el resto de ambulancias asistenciales. Es realmente la función para la que están previstas la que determina si el transporte sanitario en cuestión estará destinado a prestar soporte vital básico o avanzado. En cualquier caso, siempre son vehículos diseñados, adaptados y equipados para salvar vidas.